MAQUETACIÓN EDITORIAL

Debe contemplar el diseño estético, pero también la eficiencia comunicativa y la viabilidad productiva. Es objeto de dicho diseño tanto cada una de las páginas como el conjunto de la obra, que debe seguir un diseño, una jerarquización y un estilo unitarios.

Entendemos como maquetación editorial el diseño visual de un libro, una revista o un periódico. Consiste en colocar de una manera proyectada y definida los elementos propios de cada tipo de documento, partiendo de una rejilla base que delimite los márgenes, la justificación del texto, los encabezados o pies de texto, etc.

Las revistas son esencialmente publicaciones periódicas o seriadas, que mantienen una imagen y una identidad que las hacen reconocibles. Así pues, es especialmente importante definir esas características para marcar la línea editorial y unificar el estilo de todas las publicaciones.

Concordar los encabezados, los pies de página o los anchos de columna será esencial para dar esa sensación de continuidad al margen de la cantidad y disparidad de los artículos que contenga

Los catálogos son el vehículo esencial para vender tus productos o servicios, por ello es elemental que cuenten con una cuidada maquetación que envíe la información y las sensaciones que nos interese destacar a los ojos del potencial cliente.

La fotografía cobra una gran importancia en este tipo de trabajos, pues no hay nada más poderoso que la imagen para transmitir de manera directa todas las características que un producto o trabajo puede ofrecer. Presentar la información relevante de forma clara, concisa y ordenada será otro de los factores determinantes a la hora de plantear la maquetación perfecta de un catálogo.

Y no podemos olvidar la identidad corporativa, la imagen de marca, los logotipos o colores definitorios de la empresa o entidad que edita el muestrario, pues deben ser reconocibles y, en consecuencia, servirán de base estilística sobre la que desarrollar el trabajo.

La maquetación de libros puede parecer una tarea sencilla, pues el grueso del documento suele ser simplemente texto. Pero desde la tipografía elegida, la disposición de los capítulos, el tamaño de letra o el diseño de la portada, responden a un plan general que tiene un objetivo comunicativo concreto, una imagen que mostrar y un estilo que definir.

Además, las tipologías de libros son infinitas: con un texto de una extensión determinada, con o sin imágenes, ilustrado, con capítulos, en más de una lengua, entre otras opciones.